Las cámaras captaron toda la secuencia: un ladrón que simulaba ser un limpiavidrios, vio la oportunidad de robar el celular a un pasajero de un colectivo que estaba detenido en medio del tráfico. Y lo hizo: se lanzó contra la ventanilla de un interno de la línea 64 que estaba en la esquina de la avenida Pueyrredón y Lavalle y huyó con su botín.
Sin embargo, el Centro de Monitoreo Urbano (CMU) venía siguiendo sus movimientos y al ver el hecho dieron la alerta a la policía. Los empleados del CMU vieron que el ratero se había puesto una camisa para tratar de confundir a sus perseguidores y avisaron a los efectivos para que puedan concretar su detención.
Finalmente, los efectivos de la Policía de la Ciudad llegaron a la Plaza Miserere, donde estaba el ladrón de 18 años. Ante testigos, revisaron al delincuente y encontraron el teléfono robado. Luego, lo trasladaron a la Comisaría Vecinal 3 A de la Policía de la Ciudad por orden del Juzgado interventor.