Con el objetivo de evitar el juicio oral en la causa que investiga la muerte de Débora Pérez Volpin, el endoscopista Diego Bialolenkier pidió la probation para evitar llegar al juicio oral que podría arrancar en febrero.
Por medio de su abogado, solicitó reemplazar la acción en su contra por tareas comunitarias. Con esta acción, busca evitar proceso penal en el que se lo juzgará por homicidio culposo junto a la anestesista Nélida Puente. Si esto se acepta, podría volver a ejercer en dos años.
El abogado de la familia de la legisladora porteña, Diego Pirota, cuestionó la medida y aseguró que la rechazarán ante la Justicia. "Es evitar la imposición de una condena y la responsabilidad penal del hecho a cambio de, durante dos o tres años, realizar una actividad comunitaria por tan solo unas horas semanales. Esto es escapar por la ventana de un caso tan claro, tan probado como esto, en el que estamos hablando de un homicidio", dijo el letrado en diálogo con Arriba Argentinos.
El 20 de septiembre el juez Carlos Bruniard, titular del Juzgado Nacional en lo Criminal y Correccional N° 57, cerró la instrucción y elevó la causa a juicio oral. Ahora, Bialolenkier y Puente serán juzgados por homicidio culposo, tras participar de la práctica médica que terminó con la vida de la periodista.
"Legalmente algo así no debería prosperar de ninguna manera. Esto es un atajo, es una ley para evitar juicios en casos de delitos menores. Claramente un homicidio no es un delito menor", explicó Pirota y afirmó: "Nosotros nos vamos a oponer".
Pérez Volpin falleció el pasado 6 de febrero en el Sanatorio La Trinidad de Palermo cuando era sometida a una endoscopía. El estudio de anatomía patológica que le realizaron confirmó que había sufrido una lesión a cinco centímetros del hueso hioides durante el procedimiento médico. El juez culpó al endoscopista por esta situación y sostuvo que la anestesista "advirtió tardíamente el cuadro que presentaba Pérez Volpin y dicha demora y su posterior desempeño contribuyó al desenlace final".