Luego del asesinato de Facundo Espíndola, un joven arquero de 25 años que murió este fin de semana durante una pelea a la salida de un boliche en la localidad bonaerense de Hurlingham, este lunes la familia de la víctima expresó su profundo dolor por el fatal desenlace.
"Lo que el asesino le hizo a mi hermano no es justificable, es algo salvaje", dijo entre lágrimas Jorge Espíndola, hermano de Facundo, en diálogo con la prensa que aguardaba apostada en la afueras del velatorio del exarquero de Almagro y River.
"No sé qué pasó. No es justificable lo que hizo el asesino, es algo salvaje. Mi hermano era una persona divina, un loco lindo. No me lo devuelve nadie", se lamentó Jorge instantes previos a quebrarse y retornar a la sala donde despedían a su hermano.
Por el asesinato de Espíndola, la policía detuvo a dos personas entre las que se encuentra Nahuel Oviedo, un joven delantero que juega en San Telmo y que tiene antecedentes penales.
"Cada vez que veo a alguno a punto de mandarse una cagada le explico lo que me pasó", declaró el propio Oviedo durante una entrevista para el diario Olé en 2016, tiempo después de haber salido del Penal de Ezeiza en el que permaneció durante tres meses por un presunto ataque a una mujer policía. Años antes, había quedado involucrado en un robo a una casa.
El enfrentamiento que terminó con la vida de Espíndola quedó registrado por las cámaras de seguridad, y empezó cuando dos personas se bajaron de un auto Peugeot 308 blanco y discutieron con el arquero.
Luego de agarrarse a golpes, uno de los atacantes sacó un cuchillo y se lo clavó a Espíndola en el tórax. Acto seguido, los agresores retornaron al auto y trataron de huir. Mientras tanto, el joven herido caminó cerca de 100 metros y murió frente a un negocio.
Tras el violento episodio, una patrulla interceptó al auto en las calles Vergara y Azurduy de Villa Tesei y arrestó a los dos ocupantes, de 26 y 28 años respectivamente: el mencionado Oviedo y Ever Augusto Brisuela Cáceres.