La Justicia porteña dictó este sábado la prisión preventiva para un hombre de nacionalidad peruana que había sido liberado hace tres semanas ante el riesgo de contagio de coronavirus por ser portador de VIH y que el jueves pasado fue detenido en el barrio porteño de Parque Patricios, luego de ser denunciado por violencia familiar, informaron fuentes judiciales.
La medida fue dispuesta por el juez en lo Penal, Contravencional y de Faltas 17 Ricardo Baldomar, quien hizo lugar al pedido de la fiscal Marcela Solano, mediante una audiencia realizada vía videconferencia.
Voceros judiciales informaron a Télam que de esta manera, Olguer Hugo Zuñiga Cervantes permanecerá detenido con prisión preventiva "hasta la finalización del proceso en orden a los delitos de lesiones leves agravadas por el vínculo en concurso real con delito de amenazas con armas", según consideró en su fallo Baldomar.
Además, sostuvo que la condición de portador de VIH del acusado no implica un mayor riesgo de contraer el coronavirus en la cárcel.
El imputado fue detenido el pasado jueves en una vivienda ubicada en Iguazú al 500, de Parque Patricios, propiedad de su madre y donde continuaba con su prisión domiciliaria junto a sus hijos, a quienes se había llevado por la fuerza, a pesar de la oposición de su ex mujer.
Según los voceros, el detenido había sido condenado en febrero por el Tribunal Oral en lo Criminal y Correccional 3 de la Capital Federal a cumplir dos años y seis meses de prisión efectiva en el penal de Marcos Paz a raíz de una causa por robo y otra por violencia de género, luego de lesionar a su hija, que entonces tenía 7 años, y por privar ilegítimamente de la libertad tanto a la niña como a la madre.
Un mes más tarde, Zuñiga, que es portador de VIH y por tanto conforma el grupo de riesgo ante la pandemia de Covid-19, obtuvo la libertad asistida tras una resolución de la Sala de Turno de la Cámara Nacional de Casación en lo Criminal y Correccional, que contradijo el fallo del tribunal que llevaba la causa.
Una vez que el hombre comenzó a cumplir la prisión domiciliaria, se llevó con él a sus hijos -a pesar de que estaban al cuidado de la madre-. En la casa de su madre, golpeó y amenazó con un cuchillo a su sobrina, la cual el martes último se comunicó con el servicio de emergencias 911 y radicó una denuncia por violencia familiar en la División Protección Familiar Área Sur, de la Superintendencia de Violencia Familiar y de Género.
Ante esa denuncia, la Fiscalía Penal Contravencional y de Faltas 33, a cargo de Marcela Solano, libró la orden de allanamiento que se concretó por personal de la División Delitos Contra Grupos Vulnerables de la Policía porteña, junto al Cuerpo de Investigaciones Judiciales de la Fiscalía de la Ciudad, quienes finalmente detuvieron al acusado.
Por último, resolvió incautar las presuntas armas que podría haber utilizado y dar intervención al Consejo de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes y al SAME, para determinar el estado de salud de los menores de edad y restituir la tenencia a su madre.
"Este es un claro ejemplo de una justicia que actúa poniendo la mirada sobre las víctimas de violencia de género, con el claro objetivo de protegerlas de todo tipo de violencia con los que los perpetradores alteran sus vidas cotidianas", sostuvo al respecto el Fiscal General de la Ciudad, Juan Bautista Mahiques.