Jorge "El Tigre" Acosta salió de la cárcel para pedir un préstamo en la ANSES

El exmilitar a cargo de la ESMA y condenado a prisión perpetua, fue recibido por los empleados al grito de "genocida".

Jorge "El Tigre" Acosta salió de la cárcel para pedir un préstamo en la ANSES
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Jorge "El Tigre" Acosta, exmilitar condenado a prisión perpetua por crímenes de lesa humanidad durante la última dictadura, se acercó hasta una sucursal de la Administración Nacional de la Seguridad Social (ANSES) para pedir un préstamo y fue recibido al grito de "genocida". Sin embargo, logró hacer el trámite.

El hecho ocurrió el martes en una dependencia de la ANSES ubicada en Córdoba al 1100, en pleno centro porteño. Acosta se acercó hasta allí acompañado por el Servicio Penitenciario Federal y familiares con el objetivo de pedir un préstamo, tal como lo autorizó el Tribunal Oral Federal N°5, a cargo de Daniel Obligado.

El jefe del Grupo de Tareas de la Escuela de Mecánica de la Armada (ESMA) no fue bien recibido por los empleados del lugar. "Quienes lo reconocieron se consternaron y se negaron a atenderlo. Nadie está preparado para ver a un asesino de frente, nosotros estamos acostumbrados a tratar con jubilados y beneficiados por asignaciones familiares. Lo que pasó generó mucha angustia", dijo Diego García delegado general de ATE ANSES, en diálogo con TN.com.ar.

El momento pasó sin violencia física pero, según relató García, alguien le gritó "genocida". Pese a todo, Acosta pudo hacer su trámite, porque "lo atendió una compañera que no lo conocía", explicó el delegado gremial.

En un comunicado, ATE manifestó su "repudio absoluto a la presencia en UDAI CENTRO del 'Tigre' Acosta, la cual ha dejado una consternación entre los y las laburantes de ese sector como en el conjunto en general".

Los exoficiales de la armada Jorge Acosta y Alfredo Astiz y otros miembros de la Escuela de Mecánica Naval de Argentina, conocida como la ESMA, durante la audiencia de sentencia en noviembre de 2017. Crédito: REUTERS/Marcos Brindicci.
Los exoficiales de la armada Jorge Acosta y Alfredo Astiz y otros miembros de la Escuela de Mecánica Naval de Argentina, conocida como la ESMA, durante la audiencia de sentencia en noviembre de 2017. Crédito: REUTERS/Marcos Brindicci.

"No estamos dispuestos a tolerar se paseen libremente por nuestro organismo aquellos que han avasallado el Estado de Derecho, deteniendo, torturando y desapareciendo a compañeras y compañeros durante la última dictadura cívico-militar", agregaron.

Acosta es un excapitán de fragata que estuvo a cargo del centro clandestino de detención de la ESMA donde tomaba las decisiones sobre a quién torurar y matar. En particular, decidió arrojar al río a las monjas francesas Léonie Duquet y Alice Domon y a las madres de Plaza de Mayo Azucena Villaflor, Esther Ballestrino y María Ponce.

Acosta fue condenado a prisión perpetua en 2017 por privación ilegítima de la libertad, torturas y tormentos y homicidio agravado por más de un centenar de casos.