Desde que arrancó la cuarentena, Julia Rigo viene ayudando a cientos de familias necesitadas de Azul. La vecina del barrio San Francisco alimenta diariamente a muchas personas, y para el Día del Niño se propuso darles una merienda a los chicos del barrio. Y sí, lo logró con creces.
"La verdad que me siento orgullosa de la gente de mi barrio, si vieras que hermoso estuvo, cómo respetaron y cumplieron mi pedido de mantener distancia, la gente se portó de diez. Repartí golosinas, facturas, tortas, chocolates y juguetes a 284 chicos. Todos se fueron super felices, si hubieses visto esos ojos, creo que lo voy a recordar por el resto de mi vida. Estoy inmensamente feliz, mi familia y yo trabajamos con mucho amor", cuenta Julia en diálogo con Vía Azul.
La convocatoria fue enorme, pero siempre mantuvieron la distancia para cuidarse. "Ya para las cuatro de la tarde habíamos terminado. Hicimos un sorteo de una bici que nos donaron, un oso enorme, un desayuno, un triciclo y la frutilla del postre: una camiseta de mi amigo Agustín Farías. ¿Qué más podemos pedir? Todos se fueron super contentos", agrega Rigo.
Dicen que la pandemia desnuda a la gente: muestra lo bueno y lo malo de todas las personas: en el caso de Julia despertó muchas ganas de ayudar. "Siento la necesidad de ayudar con muy poquito. Empezó con la ayuda de mis hijos y de mi marido. Sobraba comida en mi casa y era una pena. Empecé a poner de estado en WhatsApp y la gente del barrio realmente respondió bien. Tienen un poco de vergüenza pero yo los molesto mucho para que se animen. Yo no quería mucho que esto pasara del barrio porque te digo la verdad me duele si hago comida y me quedo corta, me da pena decir que no hay más", contó la vecina del San Francisco en abril pasado.
Para ayudar a Julia se la puede contactar en Facebook o al 2281556499