Rubén Doleatto (31) fue condenado a cinco años de prisión al declararse culpable de dos delitos de abuso sexual de dos menores de 9 y 11 años en la localidad de Morteros.
Doleatto estaba imputado de los delitos de "abuso sexual simple, abuso sexual gravemente ultrajante e intento de hurto" de los menores que pertenecían a su circulo cercano.
El acusado reconoció los hechos y accedió a un juicio abreviado el que fue llevado adelante ante un tribunal unipersonal a cargo del vocal de la Cámara del Criminal y Correccional de San Francisco Mario Comes.
Como fiscal de Cámara subrogante estuvo el fiscal de Morteros Alejandro Acuña, mientras que la defensa estuvo en manos del asesor letrado César Testa y como representante complementario, otro de los asesores, Luciano Sarniago.
Al momento de su detención trabajaba en una gomería en la localidad de Colonia Vignaud, donde había fijado residencia. El hecho ocurrió en el primer semestre de 2016.
