Los Juegos Olímpicos Tokio 2020 otorgaron otro episodio memorable. Laurel Hubbard pudo competir en halterofilia como la primera atleta transgénero de la historia.
//Mirá también: Juegos Olímpicos: la historia de amor entre uno de los Gladiadores y una brasileña de la selección de handball
La neozelandesa se declaró transgénero a sus 35 años. Previamente había competido en competencias masculinas de levantamiento de pesas.
Luego de la modificación del Comité Olímpico Internacional en 2016, está permitida su participación sin la necesidad de una cirugía. “Va en contra de los derechos humanos”, habían comunicado. A Hubbard le exigieron una baja cantidad de testosterona por mililitro de sangre.
Luego de una dura lesión en su codo izquierdo en 2018, la neozelandesa estuvo cerca de cerrar su carrera. Su deseo olímpico y su movimiento revolucionario fueron más fuertes.
Ganó la medalla de oro en los Pacific Games 2019 y también lo hizo en la Copa del Mundo Roma 2020. Una vez que la Federación Internacional de Halterofilia verificó que cumpliera con los requisitos, Hubbard se aseguró su lugar en Tokio.
Compitió en la categoría +87 kilos y no logró completar ninguno de sus tres intentos de levantamiento. “Desde el punto de vista deportivo no cumplí con los estándares que me había impuesto y tampoco los que esperaba de mí mi país”, dijo luego de su participación.
//Mirá también: Juegos Olímpicos: la atleta bielorrusa Krystsina Tsimanouskaya quedó refugiada en la Embajada de Polonia en Japón
A sus 43 años logró ser la primera atleta transgénero en un Juego Olímpico. “Agradezco al Comité Olímpico Internacional por su compromiso en demostrar que el deporte es para todos, es inclusivo y esto es fabuloso”, firmó Hubbard.
Las críticas que recibió Laurel Hubbard por su participación en los Juegos Olímpicos Tokio 2020
“Cualquiera que haya entrenado en halterofilia sabe que esta situación en particular es injusta para el deporte y para los deportistas”, dijo Anna Vanbellinghen, rival belga de Hubbard en Tokio.
“Sinceramente, no me parece nada justo. Hay que aceptar las normas del COI, pero es un tema que no está resuelto y que debe estudiarse en el futuro”, comentó Constantino Iglesias, presidente de la Federación española de Halterofilia.
“Yo he visto competir a esta persona cuando lo hacía con los chicos. Seguramente no se hubiese clasificado para la prueba masculina y en cambio aquí tiene opciones de medalla”, declaró Iglesias.
Además, varios sitios se encargaron de juntar firmas para prohibir la participación de Hubbard en Tokio.
“Es una política errónea del COI la que ha permitido la selección de un hombre biológico de 43 años que se identifica como mujer para competir en la categoría femenina”, comentaron en una colecta de firmas.