Este martes la Justicia imputó a dos futbolistas de Vélez en la causa que investiga el abuso sexual de una joven durante una fiesta organizada en la casa de Juan Martín Lucero en San Isidro. Se trata de Thiago Almada y Miguel Brizuela, además de los jugadores en la causa está imputado el director técnico Juan José Acuña que se encuentra prófugo desde el mes de diciembre. El caso está en manos de Laura Zyseskind.
La víctima amplió su denuncia el pasado 22 de diciembre y dio detalles de la fiesta organizada por el jugador de Vélez en la que mencionó la presencia de drogas y alcohol. Al mismo tiempo sostuvo que nadie la ayudó y señaló a Ricardo Centurión y el dueño de la casa ya que estos no la habían asistido, además apuntó contra Almada y Brizuela por la presunta violación, detalla Clarín.
La joven detalló que fueron a la fiesta ya que Centurión invitó a una de sus amigas y que en el lugar le ofrecieron droga en reiteradas oportunidades y que le robaron la cartera y celular para que no pueda dar aviso a la Policía. Además en su declaración dejó a la vista la sospecha de haber sido drogada ya que “en un momento, el champagne se acabó y Thiago nos dice que había vodka con Speed, pero cuando me trae el vaso era vodka puro, un sabor raro”.
Junto a dos amigas permanecieron en la fiesta hasta que consintió subir a una habitación para tener un encuentro con Almada. El jugador se habría violentado y ella desistió pero en ese momento comenzó a sentirse mal y a pedir ayuda. “En un momento siento que abren la puerta e ingresan dos personas más: Brizuela y una morocha grandota de pelo negro. Escucho que Thiago habla con ellos, que se asoman. Me sentía mareada, mal. Eso no me gustó. Le dije a Thiago ¡basta! e intenté irme”, detalló la mujer y señaló que estas personas entrar a la habitación y abusaron de ella.
Fue una de sus amigas la que la encontró y en ese momento se desmayó, al ver la situación comenzó a gritar y pedir ayuda, pero según declaró nadie atinó a hacerlo solo querían convencerla de que no hiciera la denuncia: para eso le habrían sacado carteras, billeteras y teléfonos para que no avisaran a la policía o pidieran una ambulancia. Esta testigo fue quien identificó al DT.
“Me tiré encima de la puerta pero ya estaba abierta, veo a mi amiga desmayada (inconsciente) en la cama con una jarra de plástico en la mano. Veo al pelado gordo, salir de encima de mi amiga riéndose y subiéndose los pantalones”, detalló la joven que también aportó datos de la mujer que habría estado involucrada en el abuso.
Línea de atención para mujeres en situación de violencia: 144 desde todo el país. Esta línea atienden las 24 horas y es gratuita