En este momento, la principal hipótesis sobre la razón detrás del ataque al juez Claudio Bonadio, es que se trataría de una venganza de un grupo anarquista. Eso dice un informe de Inteligencia que llegó a Clarín.
Todo se remonta al 14 de diciembre de 2017, cuando se discutía en el Congreso el proyecto de reforma previsional y manifestantes impidieron que se realice la sesión. Por los hechos, hubo 33 detenidos, la mayoría de ellos vinculados a ideales y grupos anarquistas, que fueron procesados por Bonadio. Si bien gran parte de los detenidos no lo estuvo más de tres días, dos de ellos lo estuvieron por más tiempo: Pablo "Cresta" Giusto (liberado el 28 de marzo) y Diego Parodi (fines de septiembre).
Según el informe al que accedió Clarín, Marco Viola, el hombre que dejó la bomba casera en la casa de Bonadio, fue el 20 de marzo a Devoto para visitar a Giusto y llevarle comida y tarjetas de teléfonos.
Bonadio había dejado constancia de que Giusto arrojó piedras contra los efectivos policiales, y cuando estaba a punto de ser detenido, sacó una navaja. Parodi, por su parte, fue procesado por tirar una bomba molotov contra un patrullero.