Este jueves, el exjefe de Gabinete de Cristina Fernández, admitió ante la Justicia que los empresarios hicieron aportes en negro para la campaña electoral del kirchnerismo en 2013. Además, afirmó que "quien lo recolectaba era Roberto Baratta".
Abal Medina señaló que el dinero que recibió estaba destinado a financiar las campañas electorales de Daniel Scioli, Daniel Filmus y Martín Insaurralde. Tanto Filmus como Insaurralde fueron candidatos en las elecciones legislativas de 2013.
A pesar de que esos aportes de fondos fueron ilegales y hechos sin ningún comprobante que los respalde, el exfuncionario buscó despegarse del problema al declarar como imputado. Por eso, dijo que las anotaciones de Centeno que hacen referencia a su persona "coinciden solamente con los tres meses" que participó "de la campaña electoral en 2013".
En su comunicado dijo: "Siempre entendí que dichos aportes de privados eran voluntarios y de ninguna manera exigidos bajo coerción". También desconoció quienes eran los empresarios que hacían los pagos y negó cualquier vinculo con ellos.
El kirchnerista le quitó responsabilidad a Martín Larraburu, su secretario privado, que fue detenido la semana pasada por sus menciones en los cuadernos de las coimas y dijo que Larraburu "actuó de acuerdo a sus instrucciones generales".
Luego de su indagatoria, después de las 16, Abal Medina se retiró de Comodoro Py