El Gobernador Juan Schiaretti, a la espera de la canonización del Cura Brochero en el Vaticano, aseguró que no tiene roces con Ramón Mestre, intendente de la ciudad.
Ambos jefes de gobierno se encuentran en Roma, a la espera de un domingo histórico en la que el Papa declarará a José Gabriel Brochero como Santo.
"No tengo ningún roce con Mestre ni con ningún intendente. El doctor Mestre vino por su medio, estuvo conmigo y yo di instrucciones de que se lo suba a la comitiva y que participe de todas las cosas de la comitiva", aclaró el Gobernador.
En las últimas horas, ante el acontecimiento para Córdoba, trascendieron tensiones con el radicalismo y por el dinero de coparticipación.
Sin embargo, el máximo dirigente político cordobés señaló que con Mestre "está todo bien".