El gobierno nacional otorgó un aporte de más de $30 millones a los productores de Chaco afectados por la sequía y las inundaciones registradas en departamentos de esa provincia, a fin de contribuir a recuperar y a aumentar las áreas destinadas a la siembra de girasol.
La asistencia fue dispuesta por el Ministerio de Agroindustria a través del Fondo Nacional de Emergencia y Desastre Agropecuario (Foneda), y beneficiará a cerca de mil productores, según se informó oficialmente.
Con la ayuda oficial, más el nuevo esquema de comercialización del girasol que incluye la quita de retenciones y la suba del precio del producto final, junto con las condiciones climáticas favorables pronosticadas para el resto del año, se estima que la provincia podría aumentar el área de siembra de 300.000 a 450.000 hectáreas.
La medida comprende a los productores que cuenten con certificado de emergencia de hasta 100 hectáreas, de acuerdo con el siguiente esquema de segmentación: 510 pesos por ha. para las primeras 25 has.; 382,50 pesos por ha. para el rango entre 25 y 50 has., y un monto de 127,50 pesos por hectárea para el rango mayor a 50 has. y menor o igual a 100 has.
Además, los productores percibirán una asistencia económica de hasta 28.687 pesos en concepto de Aportes No Reintegrables (ANR), para la compra de insumos a utilizar en la siembra de girasol.
La provincia del Chaco declaró el pasado 1 de abril la emergencia agropecuaria para los productores cuyas explotaciones fueron afectadas por la sequía en varios departamentos del sudoeste provincial, y por inundaciones en el departamento de General San Martín.
A su vez, la cartera que conduce Ricardo Buryaile declaró el estado de emergencia planteado por la provincia el 4 de mayo, a través de la Resolución 164.
Fuente: Télam