El programa económico que el Gobierno presentó ayer, incluye el desarme de Lebac. En una nota llamada Fortalecimiento del Régimen de Metas de Inflación, el Banco Central publicó este viernes el plan con el que busca erradicar en tres años estos instrumentos y contará con la ayuda del Tesoro.
En primera instancia, el Banco Central dejará de financiar al Tesoro con adelantos transitorios. No emitirá más pesos para pagar gasto público. Lo previsto para este año era que el BCRA le giraría al Gobierno 170.000 millones de pesos. Sin embargo, de esa suma ya giró unos 60.000 millones de pesos, por lo que el saldo no se materializará.
Por otro lado, el Tesoro cancelará deuda en poder del Banco Central. Esas letras intransferibles equivalen al 10,4% del PBI, al igual que los pasivos remunerados del banco, entre los que sobresalen las Lebac.
El Tesoro se comprometió a rescatar esas letras intransferibles, equivalentes a 25.000 millones de dólares, con compras trimestrales, a partir de 2019. Aportará los pesos equivalentes a 3125 millones de dólares por trimestre . Con el dinero, pagará gastos y transferirá pesos al BCRA a cambio de las letras intransferibles. Con esos pesos, el BCRA acelerará la recompra de Lebacs, sin emitir más pesos.
De esta manera, los bancos, los inversores institucionales y el público minorista podrá seguir participando de las licitaciones de Lebac de cada mes. La próxima es el martes 19, cuando venzan algo menos de 575.000 millones de pesos. Lo que generará que, progresivamente, haya menos stock de letras en licitación.
A su vez, como el BCRA emitirá menos pesos al dejar de asistir al Tesoro, debería tener más margen para bajar la tasa de interés que necesita para esterilizar moneda.
