"Una amiga de mi hermana me contó que cada dos por tres lloraba porque él la insultaba, en especial cuando se peleaba con sus padres. Era una dominación verbal, todo el tiempo le decía que la iba a dejar", contó Ludmila, hermana de Daniela que fue asesinada por su novio de 16 años de un tiro en la cabeza tras discutir en el Pablo Podestá.
"La veíamos feliz y contenta. Una vez le pregunté, por preguntar, si le había levantado la mano y ella me dijo que no. Nunca notamos nada agresivo de su parte, por eso no podemos creer todo lo que pasó", dijo para Big Bang News su hermana.
El día del asesinato, "se fue a las ocho y a eso de las once volvió para casa. La acompañó un amiguito suyo, Maxi. Según me contó, ellos ya estaban discutiendo, pero por teléfono. Su amigo le hablaba, pero ella estaba focalizada en la pelea. Levantaba la mirada, le respondía dos cosas y seguía con los mensajitos".
Le dijo a Maxi que se iba a encontrar con su novio, quien la esperaba a dos cuadras. Justo a mitad de camino. "Su amigo me contó que mi hermana estaba muy enojada, pero que no sabía por qué estaban discutiendo", relató Ludmila.
La pareja comenzó a discutir en la calle y entraron a la casa de Fabricio porque los gritos se escuchaban en el barrio. Al rato, el padre del chico llamó a la Policía porque Daniela estaba muerta de un tiro en la cabeza dentro de la propiedad.
"Estoy segura de que intentó escapar cuando él le mostró el arma. Ella le tenía pánico a las armas. De hecho, su cuerpito estaba mirando hacia la salida, como queriendo huir".