Los métodos anticonceptivos denominados permanentes sigue siendo tarea de la mujer. Sebastián Ríos publicó para La Nación las cifras al respecto según las estadísticas del Programa Nacional de Salud Sexual y Procreación Responsable de la Argentina: en 2016 se realizaron en establecimientos públicos solo 97 vasectomías contra 12.976 ligaduras de trompas de Falopio.
De la misma manera, los números locales contrastan con los de otros países como España, por ejemplo, donde la proporción de las intervenciones quirúrgicas de anticoncepción que se realizan en el varón es cada vez mayor.
Actualmente, según la Sociedad Española de Anticoncepción, las vasectomías representan el 54% de esas intervenciones en España (contra un 46% de ligaduras tubarias). Solo en los Estados Unidos, más de 500.000 varones recurren a este método anticonceptivo permanente cada año.
Según la ley nacional N° 26.130 de contracepción quirúrgica, la vasectomía y la ligadura de trompas deben ser realizados en forma gratuita a toda persona mayor de 18 años que lo solicite. Además, ambos son métodos anticonceptivos con una tasa de efectividad superior al 99%.
La nota también destaca que son procedimientos en los que es muy difícil su reversión quirúrgica, pero en los que tanto varones como mujeres pueden -si lo desean- recuperar la capacidad de concebir con sus propios espermatozoides y óvulos (respectivamente) mediante tratamientos de fertilización asistida.
Concluye afirmando que la principal barrera es el desconocimiento.