"A diferencia de sus víctimas, se sabe la hora, el lugar y su familia puede despedirlo", con esa frase, H.I.J.O.S. Capital (Hijos e Hijas por la Identidad y la Justicia contra el Olvido y el Silencio) se refirieron a la muerte del genocida Luciano Benjamín Menéndez.
"Cachorro" llevaba en sus espaldas el triste récord de ser la persona con más condenas a cadena perpetua por delitos de lesa humanidad. "Se murió la muerte. Llegó a ser condenado en cárcel común, perpetua y efectiva, el único lugar para un genocida", agregaron.