China paralizó la compra de aceite de soja desde Argentina durante el período enero-julio de 2016 pese a haber importado casi 280 mil toneladas en este lapso, tras incrementar adquisiciones a Ucrania y Rusia.
Estos datos surgen de informes difundidos por la Consejería Agroindustrial de la embajada argentina en Beijing, donde se refirió a que "durante este período no se registraron importaciones desde Argentina" uno de los principales proveedores de este producto a China.
Si bien desde China no se oficializó el motivo del bloqueo dispuesto, en el ámbito privado local se admite que esto tiene relación con la decisión del gobierno de Mauricio Macri de paralizar la realización de obras de infraestructura adjudicadas a empresas chinas en la provincia de Santa Cruz.
Una medida similar fue adoptada por las autoridades chinas en abril de 2010 también se dispuso frenar la compra de aceite de soja con origen en la Argentina por las medidas antidumping adoptadas por la administración kirchnerista.
Según refieren informes de los consejeros agrícolas argentinos en Pekín, China compró en los primeros siete meses de 2016 279.229 toneladas de aceite crudo de soja a diferentes países, por un valor de U$S 222,44 millones, datos que reportan una caída del 24 por ciento en volumen y también en precio, respectivamente.
Allí el principal proveedor de este producto fue Brasil, que logró hacerse del 59 por ciento de este mercado asiático con la exportación de 165 millones de toneladas, por un monto de 128 millones de dólares.
En segundo lugar se ubicó Ucrania, con importaciones por 53.205 toneladas, y si bien Argentina no logró acceder a este mercado, se indicó desde la Embajada argentina en Pekín que sí se destaca un incremento en las compras realizadas a países como Rusia y Ucrania.
Durante el 2015, China cerró compras de aceite de soja por un total de 808.080 toneladas, donde Argentina fue el principal proveedor con el aporte de un 65 por ciento de esta importación, con la venta de 525 mil toneladas.
Allí Brasil cumplió con la venta de 190 mil toneladas, mientras que Ucrania aportó un 8 por ciento (65 mil toneladas) y Rusia un 3 por ciento (con 21 mil toneladas).