Al menos 160 personas murieron al derrumbarse el techo de una iglesia evangélica en el sureste de Nigeria, pero el balance de víctimas podría ser más alto. Por su parte, hay heridos de diversos grados
"Todos nuestros médicos fueron contactados para hacer frente a esta situación de emergencia", declaró el director del hospital Ibom Specialist, Etete Peters, negándose a comentar este balance.
Los socorristas -policías, soldados y bomberos siguen buscando supervivientes entre los escombros este domingo.
La iglesia evangélica Reigners Bible Ministry organizaba este fin de semana una congregación de fieles en Uyo, en el Estado de Akwa Ibom, cuando el techo de la iglesia, que todavía estaba en construcción, se derrumbó sobre la multitud.