Dos de los custodios de Alberto Nisman dijeron ante la justicia federal que el día que apareció muerto no siguieron ningún protocolo y se limitaron a hacer todo lo que solicitaba la madre del fiscal, informaron fuentes judiciales.
Los custodios pasados a retiro Armando Niz y Luis Miño prestaron este miércoles declaración indagatoria ante el juez Julián Ercolini en el marco de la causa en la que se investiga la muerte de Nisman.
Niz y Miño están acusados de haber incumplido sus deberes durante el 18 de enero de 2015, día en el que Nisman apareció muerto en el baño del departamento que alquilaba en la torre Le Parc de Puerto Madero.
Los dos policías retirados sostuvieron que no tenían ningún protocolo de acción, que sus movimientos los digitaba el propio Nisman y que ante su ausencia pasaron a responder las órdenes de la madre, Sara Garfunkel.
LOS TESTIMONIOS
El domingo en el que Nisman fue encontrado sin vida, los custodios tenían previsto encontrarse con él a las 11 en Le Parc, tal como les había ordenado, según relataron por separado.
Como era un día de lluvia, lo esperaron en el subsuelo, algo que también tenían previamente acordado con el fiscal, y cerca del mediodía intentaron contactarlo por Nextel, pero sin éxito.
Niz dijo durante su indagatoria que le habían planteado a Nisman hacer "tareas previas" de cara a su presentación en el Congreso prevista para el lunes 19, pero que el fiscal especial del caso AMIA lo rechazó.
Ante la ausencia de Nisman los custodios se comunicaron con una secretaria del fiscal que les indicó que fueran a buscar a su madre al barrio de Saavedra porque ella tenía otra llave de la casa que él habitaba.
Entre idas y vueltas, los custodios, junto con la madre de Nisman, pudieron abrir la puerta del departamento del piso 13 de Le Parc recién a las 21.50 del domingo.
Miño dijo que no se les ocurrió la posibilidad de que uno se quedara en el edificio mientras el otro iba a buscar a la madre y que la entonces secretaria letrada de la UFI-AMIA, Soledad Castro, solo les recriminó no haber tirado la puerta abajo una vez que notaron que Nisman estaba muerto.
La muerte de Nisman se produjo por un disparo en la sien a través de un arma de Diego Lagomarsino, su asistente en informática, que está imputado por haber facilitado "un arma amiga" para llevar adelante un crimen, según el fiscal Eduardo Taiano.