Fabiana Portella, quien es una publicista transexual chilena que se dedica a la producción de moda, se enojó tras la eliminación de su Selección del Mundial de Rusia 2018, se enojó y decidió contar una intimidad que complica al plantel trasandino: aseguró que dos jugadores la llamaron el jueves para invitarla a una fiesta privada y que le pedían que les llevara alcohol.
"Les dije que no y me dijeron cuanto quería. Hasta ese minuto llegó mi último cariño hacia cierta parte del fútbol. Hay momentos y momentos para todo. Y para mi, si llevará el honor de representar a mi país ante el mundo, me encierro en un búnker con mi equipo de trabajo y no salgo hasta el escenario", escribió en su cuenta de Instagram. Y agregó: "No soy una mujer trans para brindar entretenimiento a los gentleman's (caballeros), pero gracias por entretenerme a mí con sus ofrecimientos".
Entrevistada por el programa chileno Intrusos, Portella dijo que no diría los nombres de los involucrados, que ambos están casados y que lo que escribió en las redes fue un acto "visceral, porque pucha, si están tres o cuatro días antes (del partido) tratando de armar una fiesta, invitarte, (pedir) llevar copete, entonces digo qué onda. Esto pasó el día jueves".
Portella también relató que le pidieron llevar a una amiga y que como prueba tiene las conversaciones de WhatsApp, videos, audios y fotos que le mandaron, incluso algunas bastante íntimas.
"Yo creo que directamente era una invitación sexual", dijo y recordó que desde 2008 se junta con varios de ellos; incluso se juntaron días antes de partir a Sudáfrica.
