El presidente Alberto Fernández mantuvo un encuentro en la ciudad fronteriza de La Quiaca con el expresidente de Bolivia Evo Morales y este lunes lo acompañará hasta el paso fronterizo para ingresar al país vecino este lunes, horas después de que Luis Arce haya tomado posesión como nuevo jefe del Estado boliviano.
"Es el día de Evo, yo solo lo voy a despedir", dijo Fernández en un breve contacto con la prensa, al llegar este domingo a Jujuy, tras una extensa agenda política que mantuvo con otros mandatarios y líderes del mundo en La Paz, Bolivia, donde había viajado para participar de la asunción de Arce.
Más de un centenar de personas se reunieron en los alrededores del lugar en donde ambas delegaciones se juntaron para compartir una cena antes de que Morales y los suyos pongan rumbo a la ciudad vecina de Villazón, ya en territorio boliviano.
Desde ahí viajarán hasta Tupiza, en el departamento de Potosí, desde donde tomarán un avión con destino a Cochabamba, donde llegará un día antes de lo previsto, de acuerdo con las informaciones que en un primer momento el nuevo presidente del Senado, Andrónico Rodríguez, adelantó hace un par de semanas.
Morales se vio forzado a dejar el país el pasado 12 de noviembre de 2019, poniendo rumbo hacia Argentina, previo paso por México, después de la presión ejercida por la oposición y un sector de las Fuerzas Armadas, quienes lo acusaron, con el apoyo de la Organización de Estados Americanos (OEA), de haber cometido un supuesto fraude electoral en los comicios del 20 de octubre, que logró vencer con el 47 por ciento de los votos.
Arce, quien se impuso en las pasadas elecciones del 18 de octubre con el 55 por ciento de los sufragios, tomó este domingo posesión de su cargo como nuevo presidente de Bolivia en una la ceremonia de juramento celebrada en La Paz y con la presencia de varios líderes y representación internacionales.