El juez federal de Esquel, Guido Otranto, se dirigía esta mañana rumbo a la comunidad mapuche Pu Lof en Resistencia de Cushamen, 90 kilómetros al norte de esa ciudad chubutense, acompañado por una fuerte custodia de la Policía Federal, para realizar pericias en el lugar en el marco de la investigación de la desaparición de Santiago Maldonado ocurrida el 1 de agosto.
Fuentes de la comunidad expresaron a Télam su preocupación porque anoche "cortaron el acceso a la comunidad desde la ruta nacional 40 y la provincial 71", y temen "otro allanamiento represivo como el que hizo Gendarmería, cuando secuestraron a Santiago", el 1 de agosto al mediodía.
Ese día a las 20, dirigentes de derechos humanos denunciaron ante Otranto la "desaparición forzada" de Maldonado, y ocho días después la dirigente de Madres de Plaza de Mayo Línea Fundadora, Nora Cortiñas, junto Sergio Maldonado y Andrea Antico (hermano y cuñada del desaparecido), se quejaron de la "falta absoluta" de medidas de investigación por parte del juez.
Recién dos días después Otranto ordenó allanamientos a los escuadrones 36 y 35 de Gendarmería en Esquel y El Bolsón, respectivamente, y ayer en el 37 de José de San Martín, y hoy se dirigió por primera vez a la comunidad mapuche.
Según relataron a Télam integrantes de la Pu Lof en Resistencia, Maldonado fue detenido por varios gendarmes en la costa del río Chubut "que atraviesa la comunidad- y golpeado violentamente en el piso, antes de ser subido a un vehículo unimog, y traspasado a una camioneta de la fuerza, que lo llevó rumbo al sur por la ruta nacional 40."
El joven residía en El Bolsón hace tres meses y había ido al lugar a solidarizarse y apoyar la lucha mapuche, tras denuncias de represión por parte de Gendarmería, y el reclamo de liberación de su lonko (máxima autoridad) Facundo Jones Huala, preso en Esquel por pedido de extradición de Chile.