Este jueves se celebran 42 años de la primera Copa del Mundo para la Argentina. Si bien los goles de Mario Kempes y la final ganada ante Holanda en el Monumental quedan en el mayor de los recuerdos, la dictadura de Rafael Videla en esa época opacó ese Mundial del equipo del "Flaco" Menotti.
En lo estrictamente futbolístico, ese Mundial era una oportunidad para que Menotti pueda cambira la cara de una selección que fue un fracaso tras el Mundial de Suecia, 16 años atrás.
Es que la Argentina no había participado en los Mundiales anteriores y buscaba la chance de sorprender con su talento local. Ese equipo tenía como figura a Mario Kempes, quién había pasado de Rosario Central al Valencia de España. También, estaba el capitán Daniel Passarella, quien formaba dupla en defensa con Luis Galván. Y así se puede nombrar a Ubaldo Fillol, Américo Gallego, René Houseman, Leopoldo Luque, entre otros.
El sorteo clasificatorio para la Argentina no fue agraciado: Hungría, Francia e Italia en la primera ronda. Luego, la derrota con los tanos llevó a la Selección a jugar en Rosario un segundo cuadrangular con Polonia (2-0), Brasil (0-0) y Perú (6-0).
Al margen de la dictadura, la "mancha negra" de ese Mundial fue la goleada ante Perú, que despertó todo tipo de sospechas. En ese encuentro, la Selección debía ganar por al menos cuatro goles para segurarse la final.
De esta manera, Argetina llegó a la final contra Holanda, quien venía de ser subcampeón en el Mundial de 1974. Ese partido fue victoria 3-1 en tiempo suplementario, con dos goles de Kempes y uno de Daniel Bertoni.