El ex futbolista brasileño Ronaldinho, con arresto domiciliario junto a su hermano en Paraguay por ingresar a ese país con un pasaportes falsos, rompió el silencio y expresó su confianza en que "en breve" se aclarará la situación.
"Tengo mucha fe, y espero que en breve nuestra situación pueda ser aclarada y podamos salir de esta situación. Lo primero que haré será darle un beso a mi madre que, desde el inicio de esta pandemia del Covid-19, está viviendo días difíciles", afirmó "Dinho" en una entrevista con el diario ABC.
El ex Barcelona, detenido desde el siete de marzo, admitió que nunca pensó en "tener que vivir una situación así".
"Vinimos a Paraguay con mi hermano, que es mi representante, a cumplir unos contratos lanzamiento del libro 'Craque da Vida' y nos quedamos sorprendidos cuando nos dijeron que los documentos eran ilegales y quedábamos detenidos", dijo Ronaldinho.
En tanto, el campeón del mundo en Corea-Japón 2002 se refirió a su paso por la cárcel y admitió que "fue un golpe duro".
"Estar en la cárcel me ha hecho conocer la realidad de muchas personas que me han tratado con mucho respeto. Hemos jugado al fútbol y firmado autógrafos, cosas que son parte de mi vida y nunca me ha molestado hacerlas", relató.