La hija de Néstor y Cristina Kirchner se encuentra realizando un aislamiento obligatorio durante 14 días, tras su reciente regreso de Cuba.
Aprovechando el encierro, Florencia se dedica a leer e interactuar con sus 175 mil seguidores de Instagram: una red social que abrió en febrero de este año y donde comparte, fotos, textos, opiniones políticas, recuerdos y literatura.
Su última publicación, desde la cama y con un libro de poesía de Silvia Plath -una de sus autoras favoritas- sumó más de 20 mil "likes", en cuestión de horas. La anteúltima, donde se la ve de niña, junto al fallecido expresidente, obtuvo casi 40 mil adhesiones.
Ahora, la joven de 29 años también está aprovechando las "historias", para subir contenido más relajado y divertido. El pasado viernes, por ejemplo, contó que muchos usuarios quieren casarse con ella.
Editando los nombres de las cuentas -para preservar la identidad de las y los enamorados- Florencia exhibió varios mensajes recibidos. Uno decía: "Flor tomamos unos mates después de la cuarentena?". Ante la invitación, ella contestó: "Ni en p*do comparto un mate este año" (en referencia a las recomendaciones sanitarias actuales).
"¿Me puedo casar con vos?", preguntó otro. "Sí, pero dame tiempo", respondió la guionista y realizadora audiovisual. ¿Otras propuestas? "Soy gay, pero podríamos casarnos igual. Yo también estoy roto, así que nos arreglamos lo personal juntos". "Sí, sí y otra vez sí", replicó, con humor, la menor de los hijos de la vicepresidenta.
En un posteo anterior, confesó: "Estoy rara, viendo mi casa después de un año, con H(elena) que me ayuda a acomodar mis cosas, buscando la forma para dejar de sentirme extranjera".
El vínculo con su hija (producto del amor con su expareja Camilo Vaca Narvaja), así como con sus seguidores, la hacen sentir de vuelta en su hogar.