El coronavirus infectó a más de 500.000 personas en el mundo, ya dejó al menos 23.000 muertos, y recientemente se conoció que Estados Unidos superó con 82.400 casos a China, el país desde el que se disparó la pandemia.
Los nuevos datos del centro de monitoreo de la Universidad de Johns Hopkins difundidos este jueves parecen confirmar el pronóstico de la Organización Mundial de la Salud de que Estados Unidos se convirtió en el nuevo foco principal de la pandemia.
La Universidad Johns Hopkins informó en su último balance que los casos ya son más de 510.000 y destacó que Italia, con 7.503 muertes -casi un tercio de los fallecimientos totales-, es el país donde el brote golpeó de manera más mortífera hasta ahora.
Luego, en segundo lugar, se ubica España donde los contagios se aceleran y ya son 4.089 los muertos, 56.188 los contagios y 7.015 los pacientes recuperados, mientras que China, con muchos más contagios , 81.782, tiene menos muertos, 3.291, y es una de las pocas naciones donde la curva ya pasó su punto de inflexión y la preocupación de las autoridades se desplazó a lograr controlar los contagios no nativos.
Incluso, según detallaron, este jueves en China se registraron tan solo 67 nuevos casos.
A partir de esta nueva tendencia, China anunció el cierre de sus fronteras para todos los extranjeros, aún aquellos con visas y permisos de residencia, a partir de la medianoche del próximo sábado.
Por su parte, el Senado estadounidense aprobó un paquete de 2,2 billones de dólares para ayudar a comercios y trabajadores y reforzar el sistema de salud ante la epidemia. Solo en una semana, se acumularon 3,8 millones de peticiones de seguro de desempleo en ese país.