Los familiares de los diez rugbiers imputados por el crimen de Fernando Báez Sosa en Villa Gesell difundieron un comunicado en el que afirmaron que "el dolor los abruma" y enumeraron los motivos por lo que evitan a la prensa. Y respaldaron a Hugo Tomei, el abogado defensor de los acusados.
Los papás de los detenidos se refirieron a las "reiteradas e insistentes manifestaciones en diferentes medios masivos de profesionales del derecho", que "atentan contra la ética profesional".
"Hacemos saber que el núcleo familiar de cada uno de nuestros hijos vinculados a la instrucción penal preparatoria (...) jamás intentó comunicarse de manera individual o conjunta, personal o telefónica, con ningún letrado de la matrícula que no fuera el Dr. Hugo Tomei, cuyo ejercicio profesional merece nuestra plena confianza y la de nuestro hijos", señalaron en el escrito.
"Su silencio en los medios (en referencia al abogado defensor) es nuestra forma de manifestarnos ante el dolor que nos abruma a todos; puesto que también somos padres y rechazaríamos que el profesional designado recorra los espacios televisivos para fomentar en cada momento la revictimización", manifestaron.
A raíz del hecho ocurrido el 18 de enero frente al boliche Le Brique, los rugbiers están imputados con prisión preventiva como coautores del "homicidio doblemente calificado por alevosía y por el concurso premeditado de dos o más personas".
Los imputados continúan alojados en el penal de Dolores. Mientras tanto, el juez de Garantías David Mancinelli analiza si les concede prisión domiciliaria.