Nelly Beatriz Bonnet había nacido el 11 de diciembre de 1930, en la ciudad entrerriana de Gualeguay. Actriz, cantante lírica y panelista, supo hacer reír a miles de personas.
Lamentablemente, falleció el pasado miércoles. Tenía 89 años. Sus restos fueron trasladados al Panteón de Actores del cementerio de la Chacarita, envueltos de una soledad absoluta. No hubo flores, ni caravana.
Sin familiares, colegas ni amigos, y apenas acompañado por unos pocos medios de comunicación, el coche fúnebre hizo su entrada al lugar. Ella se había casado a los 15 años durante un breve período y nunca tuvo hijos, ni hijas.
Hasta su nombre estaba mal escrito: decía "Beatris", con "s", y no hubo ningún allegado que pudiera corregir el error. La falta de concurrencia devino en la cancelación de la ceremonia religiosa en la Capilla.
La artista había sido diagnosticada con demencia senil y Alzheimer. Poco se supo de ella durante los últimos años. Una señora la había estafado, quedándose con todas sus propiedades: por esta razón, había terminado en un geriátrico, lejos de su reducida familia, que reside en el interior del país.
Su carrera y últimos días.
El personaje más conocido de la artista fue Beatriz Sangüedolce, a quien interpretaba en el ciclo humorístico de Juan Carlos Mesa, Mesa de Noticias. Esto ocurrió en la década del ochenta.
En 2011, recibió el reconocido Premio Hugo y su participación laboral final ocurrió en 2010, en La Primera Dama del Musical.
A comienzos de 2018, un comunicado de la Unión Argentina de Artistas de Variedades, que circuló en las redes sociales, dio cuenta de la angustiante situación que atravesaba la mujer. El geriátrico en el que se encontraba no recibía los pagos mensuales y amenazaba con desalojarla.
Carecía, además, de obra social. Se sabe que Mirtha Legrand y de Angel Mahler la ayudaron, y permitieron su traslado al Hospital Fernández.
Al trascender el fallecimiento, Carmen Barbieri -quien conoció a Bonnet- se puso en contacto con Daniel Ambrosino, periodista de Intrusos e Infama. Confesó: "Qué tristeza lo que estoy viendo. Que en el último adiós a Beatriz Bonnet no haya nadie. Está en mi corazón y es una mujer que amé. Yo no puedo ir porque estoy trabajando en Mar del Plata".
"La mayoría de las que trabajamos con ella y la queremos, estamos igual. Nora Cárpena, Martha González, Georgina Barbarossa en Carlos Paz, todas estaríamos ahí. Pero estamos en plena temporada y no podemos. Me siento mal por ver la soledad de su cajón y nadie alrededor. No es porque era una mala persona, sino todo lo contrario. Talentosa y una mujer encantadora. Gran comediante... me duele mucho todo esto", resumió, con tristeza.
