Al menos doce personas murieron tras estrellarse este viernes un avión de pasajeros de la aerolínea Bek Air cerca de la ciudad de Almaty, en el sureste de Kazajistán, según el último balance de las autoridades kazajas, que han corregido a la baja el recuento de víctimas mortales.
Tras haber informado de quince muertos en el siniestro aéreo, cuyas causas se están investigando, el Ministerio del Interior ha confirmado que el accidente aéreo ha acabado con la vida de doce personas y ha difundido sus identidades. Del total de víctimas, ocho personas murieron en el lugar del accidente y otras cuatro luego, en centros médicos.
El siniestro dejó también decenas de heridos, que están siendo tratados en hospitales. El Gobierno armó una comisión de investigación liderada por el primer ministro del país, Askar Mamin, para determinar las causas del siniestro.
Según informa la agencia de noticias Kazinform, el avión de la compañía kazaja Bek Air tocó dos veces la pista de despegue antes de conseguir alzarse y poco después se estrelló contra un edificio de dos plantas.
El avión estrellado realizaba el vuelo de Almaty a Nursultán y llevaba a bordo 95 viajeros y cinco tripulantes. La aeronave impactó contra un edificio de dos plantas poco después de despegar del aeropuerto de Almaty.
El Ministerio del Interior confirmó que entre los pasajeros había cuatro extranjeros, dos ucranianos, uno de China y otro de Kirguistán.
El presidente de Kazajistán, Kassym Jomart Tokayev, expresó sus condolencias por el accidente y declaró este sábado como día de luto nacional en memoria de las víctimas del siniestro aéreo.
Los vuelos de la compañía aérea Bek Air fueron suspendidos este viernes. El Gobierno ha anunciado la apertura de una investigación sobre el siniestro, mientras continúan los trabajos de rescate en la zona del accidente aéreo.