Al menos 62 personas murieron en incendios forestales en el centro de Portugal, muchas de ellas atrapadas en sus autos cuando las llamas invadieron una carretera.
El primer ministro, Antonio Costa, describió el hecho como "la mayor tragedia en vidas humanas que hemos tenido en años".
Casi 60 personas resultaron heridas, incluidos cuatro bomberos y un menor herido de gravedad.
Se cree que un rayo provocó el fuego en la zona de Pedrogao Grande, ya que los investigadores hallaron un árbol que recibió un impacto durante una "tormenta eléctrica seca", según indicó el responsable de la policía nacional judicial a los medios portugueses.