Tras la confirmación de prisión preventiva de Rubén Darío "El Pepo" Castiñeiras por la Cámara de Apelación y Garantías de Dolores, la Justicia determinó que el cantante manejaba con 1,02 de alcohol en sangre al momento del accidente ocurrido en la ruta 63, que causó la muerte de de su manager y su trompetista.
Previamente, la Sala II de la Cámara de Apelaciones de Dolores rechazó la apelación presentada por la fiscal Verónica Raggio, titular de la UFI 1 de la localidad, y por el particular damnificado en cuanto al pedido de recusación del juez Cristian Gasquet.
Castiñeiras se encuentra imputado por "doble homicidio culposo agravado por conducción imprudente, negligente antirreglamentaria de vehículo a motor y por ser más de una de las víctimas fatales, y por lesiones graves culposas doblemente agravadas".