Agentes de Policía Nacional detuvieron en Madrid a un hombre de 53 años, de nacionalidad colombiana, acusado de grabar con una cámara oculta las partes íntimas de más de 500 mujeres para, posteriormente, publicarlas en páginas pornográficas.
El arrestado, según ha informado la Dirección General de Policía, es "uno de los mayores depredadores de la intimidad" y utilizaba una mochila con un teléfono móvil acoplado para grabar a las mujeres por debajo de sus faldas y vestidos en Metro, Cercanías o siguiéndolas a tiendas o supermercados, publicando 283 vídeos en portales que suman "millones de visualizaciones".
La Policía ha identificado a 555 víctimas, algunas de ellas menores de edad, de esta práctica denominada 'Up Skirting' (vídeos no autorizados por debajo de las faldas). El arrestado, según han apuntado fuentes policiales, no tenía antecedentes policiales previos y se le acusa de delitos contra la intimidad de las personas y por abuso y prostitución de menores.
El presunto autor de los hechos actuaba de forma "compulsiva", a diario y grabando a todas las mujeres que podía. Fue detenido 'in fraganti' mientras captaba imágenes de una mujer por debajo de su vestido en Metro de Madrid.
En el registro de su domicilio, los agentes han intervenido numeroso material gráfico, aún pendiente de análisis, y estudio por parte de agentes especializados para precisar el "alcance real" de la investigación.
La investigación se inició cuando los agentes localizaron un portal web dedicado a la publicación de vídeos de contenido sexual explícito y pornográfico con más de 20 millones de seguidores.
Los policías encargados de las pesquisas observaron que un perfil de dicha página estaba publicando multitud de vídeos, grabados en Madrid, en los que se podían ver zonas íntimas del cuerpo de centenares de mujeres.
En concreto se trataba de grabaciones realizadas, posiblemente, con una cámara oculta y sin el conocimiento ni consentimiento de las mujeres que aparecían en ellas, lo que se conoce como 'Up Skirting'.
Los investigadores constataron que, en ocasiones, además de grabar imágenes de cuerpo entero y partes íntimas como los glúteos y/o la ropa interior, también recogía los rostros de las víctimas, con el perjuicio añadido ello conlleva.
Del análisis del perfil investigado, los agentes determinaron que el primer vídeo de este tipo se publicó en julio de 2018, si bien se desconoce si había realizado la misma actividad con anterioridad en algún otro lugar o utilizando otra página web de contenido pornográfico.
Asimismo, observaron que el detenido "había ido repitiendo y perfeccionando" este 'modus operandi', ininterrumpidamente, desde que creó el perfil hasta que fue detenido. Actualmente, el citado perfil contaba con 3.519 suscriptores, 84.594 visitas y un total de 1.367.999 visualizaciones de sus publicaciones.
Una vez comprobados los hechos y tras un análisis exhaustivo de cada una de las publicaciones, agentes especializados han corroborado que el número total de vídeos subidos por el presunto autor a la página web, a través del perfil investigado, asciende a 283. En dichos vídeos aparecen 555 víctimas, todas ellas mujeres, grabadas en diferentes entornos como el Metro, el tren de Cercanías o supermercados de Madrid.
Con el avance de la investigación, los agentes concluyeron que el detenido, generalmente, captaba a sus víctimas en lugares transitados como el suburbano; después las seguía hasta la calle, llegando incluso a introducirse con ellas en supermercados o tiendas para poder obtener mejores tomas de sus zonas íntimas, las cuales grababa "muy de cerca".
Tras varias gestiones, los investigadores identificaron a un individuo como presunto autor de los hechos descritos, tratándose de un varón de nacionalidad colombiana de 53 años de edad.
Una vez identificado, los agentes lograron localizarlo en el Metro de Madrid y lo detuvieron 'in fraganti' mientras grababa a una mujer por debajo de su vestido.
En ese momento portaba una mochila negra y, en uno de los bolsillos, llevaba acoplado un teléfono móvil, estratégicamente colocado, con el dispositivo de grabación activado para la obtención de las imágenes ilícitas.
Tras el registro de su domicilio, los policías intervinieron tres discos duros y un ordenador portátil que contenía "decenas de gigas" de vídeos grabados a centenares de víctimas.
Si bien el material está siendo analizado para precisar el alcance real de la investigación, los agentes determinaron que el detenido "grababa de forma compulsiva, prácticamente a diario, siempre que tenía ocasión y a todas las mujeres que podía".
Los agentes han logrado identificar a 29 mujeres que fueron grabadas en apenas cinco días, alguna de ellas menores de edad. El detenido fue puesto a disposición judicial, decretándose su ingreso en prisión provisional.