A trece años del lanzamiento de Hannah Montana, aquella serie de Disney que volvió a Miley Cyrus una estrella de Disney, la cantante pop se tomó un tiempo para recordar los motivos por los cuales en su momento decidió abandonar el personaje.
En una entrevista para el portal Elle, Cyrus confesó: "En una ocasión, cuando tenía 18 años, sí que quise dejar de ser Hannah porque me sentía ridícula. En cuanto mantuve relaciones sexuales por primera vez, tuve la sensación de que no podía volver a ponerme esa maldita peluca rubia. Era extraño. Era como si me hubiera vuelto mayor de repente".
Además, Miley Cyrus recordó una situación que la incomodó cuando trabajaba en la serie: "Entré bambalinas en Disneyland, y Peter Pan estaba fumando un cigarrillo. De pronto supe que esa era yo, que yo también estaba destruyendo una fantasía".
"Eso es lo mismo que sentí cuando se publicó el vídeo en que aparecía fumando una pipa de marihuana, pero al final yo no era solo una mascota de Disney. También era una persona", reflexionó.
En medio de la entrevista, Cyrus confesó que su "etapa de adolescencia se veía consumida en el personaje". "Siempre tenía que estar maquillada y portando ropa ajustada", ya que Disney los presionaba para que mantuvieran una imagen impecable, concluyó.