Daniel, el chico de ocho años que venció al cáncer con ayuda de Gerónimo Rulli

El arquero argentino acompañó al niño durante todo su tratamiento.

Daniel, el chico de ocho años que venció al cáncer con ayuda de Gerónimo Rulli
2016 Rio Olympics - Soccer - Preliminary - Men's First Round - Group D Argentina v Algeria - Olympic Stadium - Rio de Janeiro, Brazil - 07/08/2016\u002E Goalkeeper Geronimo Rulli (ARG) of Argentina during the match\u002E REUTERS/Leonhard Foeger FOR EDITORIAL USE ONLY\u002E NOT FOR SALE FOR MARKETING OR ADVERTISING CAMPAIGNS\u002E rio de janeiro brasil Geronimo Rulli juegos olimpicos rio 2016 futbol futbolistas partido seleccion olimpica argentina argelia

Gerónimo Rulli es uno de los futbolistas que se desempeña en Europa. Es arquero, que supo ponerse la camiseta de la selección argentina, y tras su paso por Estudiantes de La Plata se encuentra hace tiempo en la Real Sociedad de España. Pero para un niño de ocho años que venció al cáncer, el es mucho más que el guardameta de su equipo.

''Danel es un chico que conocí en el primer año que llegué. Un día entré al vestuario, vi a un nenito calvo, chiquito, peleando contra una enfermedad. Y yo simplemente lo que hice fue actuar con mi corazón, para que pasara ese tránsito de la enfermedad de la mejor manera posible'' detalló el jugador sobre el primer encuentro al programa ''Jugones''.

Además de ello, el pequeño le enviaba mensajes a Rulli antes de cada partido, y este se los respondía, alegando que no hubo encuentro en el que no se hablaran en la previa. Incluso, en su cumpleaños, lo llevó al cine y lo invitó a cenar con su familia.

Finalmente, Daniel logró superar un cáncer luego de cinco años. Rulli pudo verlo recuperado en el programa antes mencionado que se transmite por ''La Sexta'', donde recibió una sorpresa al recibir una visita suya en vivo. ''Muchas gracias por todo lo que has hecho. Estoy muy agradecido. Nunca lo olvidaré'' manifestó el niño, ante la emoción del portero.

''No comía ni hablaba. Ni siquiera con nosotros. En 2014, el delegado del club fue a verlo al hospital para llevarle los botines que le había enviado Claudio Bravo y una carta de Gero Rulli. Mi hijo hizo un click. Volvió a vivir. Me acuerdo de esa sonrisa, esas lágrimas y los gestos. No lo podía creer'' esgrimió emocionado Donato Cubero, padre del chico.

''Después de tantas semanas se incorporó, recuperó su cuerpo. Nada volvió a ser igual. Lo que hicieron por mi hijo no me va a alcanzar la vida para agradecerlo'' continuó. La madre fue un tanto escueta, explicando que: ''Él, para nosotros, ya no es un futbolista: es parte de la familia''.