El 1° de marzo, el intendente tendrá a su cargo las palabras inaugurales del año Legislativo en Alta Gracia. Un repaso por lo realizado y un adelanto de lo proyectado para 2019 regirán su discurso en la antesala de un largo calendario electoral.
Una semana antes, Facundo Torres dialogó con Vía Alta Gracia sobre estos casi doce años en la vida política local y aventuró que los logros de su gestión determinarán el nombre de su sucesor en el sillón de Lepri.
- ¿Cómo te gustaría que se te recordara?
- Como un intendente que trabajó seriamente y en forma responsable, gestionando todo lo que le hacía falta a Alta Gracia. Faltaron muchas cosas pero queda la impronta marcada de una ciudad que tiene que ocupar un lugar preponderante a nivel nacional. Lo que traté de jerarquizar siempre fue la marca Alta Gracia.
- ¿Está promoviendo la candidatura de su hermano Marcos para la intendencia?
- Hace tres años que me empezaron a preguntar sobre el tema y yo dije que la persona que mejor imagen tenga, que más mida, que esté más involucrada con la gestión, va a ser la que vamos a apoyar para que sea el futuro intendente. Después de decenas de encuestas tiradas por la Provincia, por mí, por otros partidos, las cosas se empiezan a encolumnar atrás de una visión: la gestión tiene una valoración de más de 75 puntos y por ende, el intendente Facundo Torres tiene una imagen muy positiva. Una encuesta provincial me muestra como el intendente con mejor imagen de las ciudades más grandes de la provincia. Entonces, a cinco meses de una elección, la gente se va a empezar a referenciar con las personas más cercanas a Facundo Torres. Marcos es mi socio político desde que trabajo en el Concejo Deliberante; no hay ningún funcionario que no haya sido consensuado con él, no hay una sola decisión que yo haya tomado solo. Entonces para mí no es una casualidad que a la gente cuando le preguntes, lo emparente tanto con la gestión.
Facundo Torres niega cualquier conflicto o rispidez interna con el "saieguismo" y afirma que prima el trabajo en equipo: "No va a haber internas y el gobernador le dará el sello a todos los intendentes que están representando a Unión por Córdoba. El que mejor mida va a ser el candidato, es la única manera de no sangrar hacia adentro y de mantener una gestión que es excelente y el vecino reconoce".
- ¿Cómo vio a la oposición en estos años?
- Pensó más en llegar al poder que en el crecimiento de Alta Gracia. Pero no ocurre sólo acá, las oposiciones están mezquinas y egoístas en todos lados y yo el primer año me senté con ellos. Después aprendí a gobernar sin la oposición. Les tengo respeto, los estimo, sé que quieren a Alta Gracia pero no nos aprobaron la compra ni el proyecto del Cine Monumental Sierras, no nos aprobaron el balance de Peperina, no nos aprobaron la apertura de la calle del Sierras Hotel. Yo respeto a la oposición, los entiendo, legítimamente buscan lo mejor para Alta Gracia pero no van a aplaudir lo que sea beneficioso para nosotros.
Torres estima que el vecino priorizará las ideas y los proyectos a la hora de emitir el voto: "Alta Gracia dejó de ser la ciudad que con caminar, saludar a todo el mundo y sentarte a tomar un café, eras intendente. Hoy la gente busca capacidad de gestión".
Finalmente, afirma que "no hay cosa en la ciudad que no esté mejor que cuando empezamos", expone que "en el peor año económico de la Argentina, tenemos 25 frentes de obra abiertos y se les paga a los empleados en tiempo y forma" y remata que "votar a otro partido es detener el progreso que hemos instalado, es suspender esta dinámica que le hemos otorgado al gobierno municipal".