Hace un mes aproximadamente, Federico Agüero y Evelyn Miranda, oriundos de Buenos Aires, se unieron en feliz matrimonio. Ellos se conocieron hace un tiempo, en la congregación de una iglesia cristiana, por medio de la música. Ella es cantante y él baterista, y por esas cosas del amor desde que se conocieron comenzó una relación que iba a durar bastante, quizás sin que ellos se dieran cuenta.
"Un día Evelyn posó sus ojos sobre mí y empezó a perseguirme, empezó como a aparecerse alrededor mío y digo '¿qué está pasando?'. Se empezó a acercar más a mis grupos de amistades y ahí comenzamos a frecuentarnos más, a conocernos más con amigos y nos comenzamos a dar cuenta que nos conocíamos hace años, pero llevábamos tal vez, casi 2 meses conociéndonos", relató Federico.
Entre
salidas con amigos, charlas y juegos
, ese sentimiento que había entre los dos se reforzaba y
cada día, era un día más de afianzar el vínculo
. A través de conversaciones por redes sociales, Federico, se dio cuenta que crecía ese sentimiento en su interior y
.
"Me está buscando, me está buscando y me va a encontrar…y me encontró"
, dijo.
Un día la invitó a tomar un café y así empezó. "Una salida, segunda salida, tercera salida y dijimos, 'la verdad es que estamos enamorados'. Nos dimos cuenta que estábamos enamorados en tan poco tiempo, pero yo en ella pude encontrar una persona que la conocía por años", relató Federico y agregó que entre los dos compartían el mismo humor, las mismas charlas y podían hablar de todos los temas.
Lo más importante para él es que en ella encontró reflejado a Dios. Ellos son muy creyentes y están parados muy firmes en ese camino. "Eve representa para mí, el amor que siempre soñé y ella es mi regalo, simplemente eso", dijo Federico. A lo que Evelyn asintió y reforzó los dichos de su marido con "y él es el mío".
Los meses pasaron y su relación se mantenía firme, así que
decidieron dar el siguiente paso, el casamiento
. Ellos habían programado la fecha de casamiento para el
20 de marzo y el 22 pensaban hacer una celebración
con la familia y amigos, pero llegó la pandemia y
"
Fuimos igual
, ese viernes estábamos con la cuarentena confirmada, pero
no nos habían cancelado la fecha
de nuestro casamiento del registro y ahí mismo,
en la puerta, nos dijeron que no
", contó Evelyn.
Con la ceremonia cancelada y el salón donde iban a celebrar, también cancelado, se vieron con sus ganas y las emociones encontradas. "Fue un golpe duro", afirmó Evelyn. No solo les sucedió eso, en esa misma semana, le robaron el vestido de novia. Afortunadamente para ella, pero con recargo de trabajo para la modista, tuvieron listo otro vestido en una semana. "Un vestido de 6 meses en una semana, me lo hicieron corriendo. Estuvieron trabajando como 6 personas", dijo Evelyn y agregó que "lo dejaron igual y más lindo todavía".
Con todo en contra, la cuarentena, el Registro Civil, el robo del vestido, el salón de la celebración cancelado y la incertidumbre de no saber qué hacer, siguieron confiados en lograr su propósito, aunque Federico confesó que "fue difícil, es un momento muy complicado. Para nosotros fue un shock, fue un sacudón, un golpe. Así lo sentimos al principio". Igualmente, se apuntalaron entre ellos y la situación no les afectó como pareja, ni los alejó de su plan original. "Hay algo muy firme del amor. El amor cuando está, puede venir viento y marea, pero el amor es amor, no deja de serlo, jamás deja de serlo", afirmó.
Ante la adversidad, buscaron por todos los medios concretar la ceremonia de enlace matrimonial. Buscaron hablar con alguien que les abriera la puerta y siempre firme con la fe en Dios que iba a proveer esa ayuda. Y la ayuda vino de la mano de un hombre que atiende la línea 147 (línea de atención al ciudadano de CABA), quien les proporcionó el correo electrónico de colaboradores del Jefe de Gobierno, Horacio Rodríguez Larreta. "Escribí y a la semana siguiente me llaman del equipo del Gobierno de la Ciudad y nos dijeron que iban a hacer todo lo posible para hablar con el Registro para que se habilitara nuestro caso puntual", dijo Evelyn. "Fueron dos semanas que se dieron, así, todo. Nos llamaron un martes y nos dijeron 'el viernes se casan'", agregó.
Luego de las peripecias que tuvieron que pasar, firmes en su fe y convicciones, lograron alcanzar su mayor anhelo como pareja. El 17 de julio fue "el gran día", en el cual, acompañados solamente por los testigos del enlace, contrajeron matrimonio. No obstante, a la tarde, vía zoom, lograron reunirse con sus seres queridos y realizar una ceremonia con sus pastores, quienes les brindaron la bendición a la nueva pareja de casados. A esa ceremonia concurrieron más de 100 personas de varios puntos del país y otros países.
Esta situación, aunque parecía que venía de la mano del infortunio, fue una situación que los hizo crecer y les sirvió para bien. "Fue un tiempo de desestructurar muchas cosas en nuestras mentes", dijo Evelyn. "Uno sueña un ideal, por ahí, de cómo quiere las cosas, pero cuando realmente le encontrás el valor a lo que es lo esencial, que es el amor y la unión, todo queda a un lado".
Así es que su experiencia sirvió para ser la puerta de ayuda a otras parejas que pasaron lo mismo que ellos. Dos parejas más, después de su caso, pudieron casarse con la ayuda de Federico y Evelyn, quienes le proveyeron de contactos y tips para que puedan sobrellevar la situación.
Para finalizar, Evelyn dijo que si alguien está pasando por una situación adversa, ya sea en el proceso de casamiento u otra situación difícil de depresión o tristeza "que no pierdan la fe, que esta situación va a pasar también y que pongan su mirada en Dios. El único amor que te puede completar en cualquier situación, es la de Dios". "Crean en el amor, basta de pelear. Es momento de disfrutar, ante tanta incertidumbre, ante tanta pandemia. El hombre no fue diseñado para eso, el hombre fue diseñado para disfrutar de este regalo llamado vida", concluyó Federico.