Personal de la División Sustracción de Automotores realizaron este jueves una serie de allanamientos en el marco de un robo millonario ocurrido hace diez días.
La víctima se encontraba en su casa en pasaje Mejía Mirabal al 500 con un grupo de amigos, cuando tres personas armadas irrumpieron en su domicilio, exigiéndole dinero de la supuesta venta de una camioneta, pero el hombre desconocía de qué le hablaban pues no había hecho ninguna transacción de ese tipo.
El joven recibió golpes y los malvivientes escaparon en un auto Volkswagen UP blanco donde los esperaba un cuarto cómplice, llevándose sus celulares, computadoras, televisores y dinero.
Como resultado, aprehendieron a un miembro de la banda delictiva, de 18 años, que se dedican a robar y luego comercializar. Además, secuestraron 30 iPhones, con un valor total $1.2 millones.
En tanto, la Fiscalía se ordenó que se localicen a los dueños de los móviles cuyos números figuraban en algunas de las pantallas y se les reciba la denuncia correspondiente.