Hace 45 años, el 5 febrero de 1975, es una fecha importante en esta provincia, que la historia reciente todavía está tratando de descifrar sus consecuencias en los distintos juicios de lesa humanidad. Un total de 14 procesos se vienen desarrollando en el TOF (Tribunal Oral Federal), ubicado en la esquina de Crisóstomo Álvarez y Chacabuco, de esta ciudad.
En los mismos, se muestra que esa fecha fue el inicio de las acciones del terrorismo de Estado, mientras que los condenados esgrimen que fue una guerra. Ese día, la presidenta de la Nación, Isabel Martínez de Perón, dictó el Decreto Secreto y Reservado 261/75, por el cual se pone en marcha el Operativo Independencia y en los considerando argumenta que la medida se adopta por "las actividades que elementos subversivos desarrollan en la Provincia de Tucumán y la necesidad de adoptar medidas adecuadas para su erradicación".
A su vez, en el artículo siguiente, señala que el "Comando General del Ejército procederá a ejecutar las operaciones militares que sean necesarias a efectos de neutralizar y/o aniquilar el accionar de los elementos subversivos que actúan en la Provincia de Tucumán".
Esos elementos subversivos, a que hace referencia el decreto, eran los integrantes del Ejército Revolucionario del Pueblo (ERP), liderados por Roberto Mario Santucho, santiagueño, contador, recibido en la Facultad de Ciencias Económicas de la UNT. Santucho muere el 19 de julio de 1976, en Villa Martelli, Buenos Aires.
Por ese entonces, en la provincia gobernaba Amado Nicomedes Juri, y en el peronismo ya estaban las internas, luego de dos años del gobierno iniciado el 25 de mayo de 1973.
Acdel Vilas y Domingo Bussi
Y hay dos figuras militares que sobresalen en esa época en la provincia: los ex comandantes en Jefe de la V Brigada de Infantería, Acdel Edgardo Vilas y Antonio Domingo Bussi. Ambos habían sido entrenados en los EEUU.
Quien hizo una interesante comparación sobre la personalidad de estos dos personajes, es Marcos Taire, periodista, ex dirigente de la Asociación de Prensa de Tucumán y que en esos años era delegado de los periodistas en la CGT. Sus afirmaciones las hizo en el programa televisivo, Primer Plano.
Taire remarcó que "fueron dos tipos de criminalidades totalmente distintas. Vilas fue de una criminalidad ostentosa, pública. Mucha gente no lo debe saber. Vilas tiró cadáveres de helicópteros a la vera de los caminos. Vilas tiró un cadáver un día en la Plaza Independencia. Otro día, en la rotonda del Parque 9 de Julio. Hizo explotar autos con personas adentro".
En ese sentido, señala que "cuando llega Bussi, lo que hace es clandestinizar más la represión y desaparece de la faz de la tierra, de lo que veíamos el aparato represor ilegal". Asimismo, el periodista reflexiona que "el Comando Táctico que funcionaba frente a la Plaza de Famaillá, se va a un ingenio cerrado, que está lejos de la vista de todos, Nueva Baviera".
"La Escuelita de Famaillá se cierra y se la reemplaza por el Arsenal (Miguel de Azcuénaga), que no conoció nadie, hasta que aparecieron los primeros sobrevivientes. La única diferencia fue esa, pero fueron igual de criminal y quizás peor en algunos aspectos", enfatizó.
Por último, en referencia a los juicios y a las megacausas que se realizaron, Taire indicó que "es un avance muy grande lo que se ha logrado, pero ni remotamente se ha podido, y creo que ya no se va a poder, llegar al total".
No obstante, confesó que un "fiscal me dijo que, cada vez que pueden realizar un viaje a los lugares que han sido muy castigados, encuentran cinco o seis casos nuevos. Ya sea gente enterrada en cementerios normalmente, pero jamás denunciada. Creo que es mucho lo que hay que hacer, sirve para el futuro".