Personal policial de la CPR y de Caballería tuvieron que acudir de refuerzo para apoyar al personal policial que se encontraba de servicio durante la noche del viernes y la madrugada del sábado, debido a los muchos conflictos, en algunos casos de extrema violencia, que se registraron durante la jornada, incluyendo 4 operativos por fiestas clandestinas, a los que la policía debió concurrir.
En una madrugada con varios frentes abiertos, hubo tres casos de violencia que causan preocupación.
Cerca de la 1:30 de la madrugada, en las inmediaciones del puente faraónico, mas precisamente en Esteban Echeverría al 100 se registró una pelea, en la cual un hombre de 24 años, identificado como Kevin Giljberls fue apuñalado.
Instantes después del hecho, Kevin Giljberls se dirigió junto con algunos conocidos, a calle Rocha al 100 donde baleó a quien minutos antes lo había apuñalado.
Luego Giljberls fue trasladado al hospital Pirovano por sus familiares e ingresado directamente al quirófano por la gravedad de la lesión recibida en el diafragma y quedó alojado en terapia intensiva en estado delicado.
El herido de bala, autor del ataque contra Giljberls, del cual no trascendió su identidad, ingresó al Hospital con una herida de bala en el muslo y tras las curaciones, fue detenido y alojado en la Comisaría Primera.
Mientras el hombre baleado era asistido en el hospital, su pareja una mujer de 21 años ingresó al Centro de Salud y fue aprehendida por resistencia a la autoridad, luego de agredir a los uniformados que hacían la custodia en el lugar.
Otro hecho violento se produjo en el Barrio Santa Teresita, cuando un grupo de personas que se trasladaban en un VW Gol de color gris, realizaron varios disparos contra un grupo de personas que se encontraban en la vía pública.