Consejos de la secretaría de Prevención y Salud de Tres Arroyos para evitar la deshidratación y los golpes de calor en adultos mayores

Los adultos mayores es el grupo etario que más sufre las consecuencias de las altas temperaturas.

Consejos de la secretaría de Prevención y Salud de Tres Arroyos para evitar la deshidratación y los golpes de calor en adultos mayores
Hay que controlar la hidratación de los niños y adultos, ya que son más propensos a deshidratarse. (Freepik)

Llega el calor, y la secretaría de Prevención y Salud de la Municipalidad de Tres Arroyos aconseja algunas acciones a seguir para evitar la deshidratación y los golpes de calor en los adultos mayores, junto con los niños, son es el grupo etario que más sufre estas consecuencias.

Golpe de calor, síntomas
Golpe de calor, síntomas

Los pasos a seguir son prácticos y sencillos:

  • Aumentar el consumo de líquidos, aunque no se sienta sed. Se aconseja beber dos vasos de agua al despertar y antes de acostarse sumando al menos 8 vasos de agua a lo largo del día.

Recordemos que el  adulto mayor generalmente se deshidrata rápidamente por perder la sensación de sed.

Síntomas como piel apagada y escamosa, sequedad de la boca ojos hundidos, debilidad y confusión  pueden ser indicadores de deshidratación.

El color oscuro de la orina la cantidad y frecuencia también nos pueden indicar deshidratación. Es fundamental la alimentación e hidratación.

  • Evitar el consumo de bebidas alcohólicas o azucaradas y las comidas abundantes. Privilegiar la ingestión de frutas y verduras.
  • Permanecer en espacios ventilados.
  • Evitar exponerse al sol entre las 10 y 17 horas, y las actividades físicas en ese horario, usar ropa ligera, holgada, de colores claros y usar sombrero.

Síntomas de un golpe de calor

La presencia de intensa sed sensación de sequedad en la boca temperatura corporal  mayor a 39 grados, fatiga, agotamiento, mareos, desmayos, pérdida del apetito, nauseas, vómitos y dolor de cabeza nos pueden indicar la presencia de un golpe de calor. Se debe colocar a la persona en un lugar fresco, tranquilo, refrescarlo y darle de beber agua.

Recordemos que enfermedades previas como la diabetes, las enfermedades cardiovasculares y la hipertensión aumentan los riesgos de sufrir un golpe de calor y deshidratación.