Luego del incendio de una casa de Santo Tomé que se cobró la vida de un niño de nueve años y dejó a tres de sus hermanos en grave estado, la madre de los menores retornó a su vivienda tras ser dada de alta en el hospital. Al llegar, se encontró con que sus vecinos quisieron lincharla.
Testimonios brindaron al sitio Aire de Santa Fe manifestaron que los ciudadanos de esa zona estaban indignados por los reiterados hechos de violencia y maltratos contra los pequeños. De hecho, algunos habían hecho denuncias al respecto.
"Viene de hace muchos años", aseguraron. Seguidamente, una de las vecinas dijo conmocionada: "No puedo sacarme de la cabeza la cara de la niña triste. Siempre le decía Micaela, la de ojitos tristes".
“Había días que comenzaba a gritarles a las 7 de la mañana y seguía hasta las 23 de la noche”, sostuvo.
Tras los hechos de violencia de este lunes, se hicieron presentes en el lugar efectivos policiales y la mujer debió abandonar la vivienda.
"Lo que vivimos el domingo fue una película de terror. Era una muerte anunciada", dijo otra vecina.
Vale destacar que el incendio de la vivienda de calle Victoria Ocampo al 4300 ocurrió el último domingo. Por la furia de las llamas, un niño de nueve años perdió la vida (Nicolás Carnero) y tres de sus hermanos (Jesús de 7 años, Micaela de 13 y Mariano de 19) luchan por sobrevivir.
En tanto, Sofía Carnero de seis años quedó al resguardo de una vecina. Por otro lado, una joven de 22 años, identificada como Betiana Carnero, fue asistida por inhalación de monóxido de carbono. Asimismo, la abuela de los pequeños, una mujer de 63 años, también sufrió principio de asfixia por inhalación de monóxido de carbono. Por último, la madre (Alejandra) ingresó con quemaduras en las manos y brazos al Hospital Cullen pero ya abandonó el nosocomio.