Una enorme repercusión tuvo la marcha convocada en Avellaneda para repudiar la avanzada del Gobierno nacional para expropiar Vicentin. Gran cantidad de vecinos con banderas argentinas se movilizaron bajo el lema "Cuidemos lo Nuestro".
La marcha, que contó con el auspicio de la Municipalidad de Avellaneda, se realizó desde las 18 con un abrazo simbólico, embanderando la sede central de la agroexportadora. Luego comenzó una movilización que incluyó bocinazos y gritos de "no a la expropiación".
La determinación nacional generó gran malestar en la comunidad del norte santafesino, que repudió la llegada a Reconquista de funcionarios nacionales producida este martes por la mañana. El designado subinterventor designado ayer por Alberto Fernández, Luciano Zarich, se reunió con el juez de la causa, Fabián Lorenzini, para notificarlo sobre las medidas anunciadas por el presidente.
Una vez que arribó a la empresa, se le negó el ingreso al edificio que estaba bajo llave y se vivieron momentos de tensión. "¡Abran delincuentes!", cuenta el sitio Reconquista Hoy que gritaron desde la delegación nacional a quienes estaba adentro, a lo que le respondieron con insultos y una rotunda negativa.
Acto seguido, la comitiva nacional que había llegado con dos aviones, ocho autos y camionetas de la Policía de Seguridad Aeroportuaria y de la Policía Federal, pasó a tomarse selfies con el edificio de fondo. Posteriormente fueron la Municipalidad de Reconquista, cuyo titular apoya la determinación nacional.
En cambio no ocurre lo mismo con el intendente de Avellaneda, Dionisio Scarpin, que anunció que hará todo lo que esté a su alcance para impedir esta decisión. "Nos están robando la historia. La deuda se paga con trabajo, no de esta forma". A su voz se sumaron las de integrantes de la Sociedad Rural de Reconquista, que en un comunicado expresaron: "No vinieron por Vicentin, no vinieron para proteger la producción. Vinieron por nosotros, vinieron por la democracia. Hoy nuestra bandera a media asta simboliza la tristeza ante el entierro de los valores republicanos".
También las Confederaciones Rurales Argentinas se mostraron en contra. "Vemos que hay una línea orientativa del Gobierno para avanzar sobre las empresas privadas, y la historia de la Argentina demuestra que los avances del Estado sobre las empresas privadas no han sido positivos", advirtieron.