Este viernes fueron exhumados en el cementerio de Recreo los restos de Diego Román, el chico de de 12 años asesinado y mutilado. El cadáver fue enviado a Buenos Aires para que sea analizado por un equipo médico.
Según el primer examen el nene de 12 años había sido mutilado y recibido alrededor de 30 puñaladas con diversas armas, despertando sorpresa en el mismo perito que analizó el cuerpo.
"Tengo más de tres mil autopsias y nunca vi algo como esto", había dicho Pascual Pimpinela. "Para mí es un caso único que merece toda la investigación científica del tema, más allá del hecho criminal", agregó.
Sin embargo, a pedido de los fiscales de homicidios Andrés Marchi y Ana Laura Gioria se hará un reexamen por parte de la Gendarmería Nacional de la autopsia que desarrolló en la morgue el Cuerpo Médico Forense del Poder Judicial.
La mamá de Diego Román y su abogado, Dionisio Ayala, estuvieron presentes en el cementerio de Recreo y se mostraron en desacuerdo con la medida. "Se está revisando lo hecho por un perito de alto conocimiento técnico, como es el Dr. Pimpinela, con cuya posición también concuerda el Dr. Marchi, que es el causal de la muerte, que fue una muerte violenta", dijo el letrado.
Para Ayala se está perdiendo el tiempo porque "se está analizando lo que ya está resuelto", en vez de profundizar sobre el o los autores del hecho y sus razones. En cambio solicitó llevar a Cámara Gesell a amigos de Diego, que podrían aportar información sobre lo ocurrido.