El Juzgado de Faltas, a través de su programa de compensación de infracciones, realizó días atrás una donación de $20.000 a favor de la cooperadora de la Escuela N°29, que según argumentó su directora se va a utilizar para adaptar la institución a las necesidades de un alumno que padece disminución visual severa.
De hecho, fue la misma educadora quien había solicitado el pedido del presupuesto al Municipio para reacomodar el patio y construir un salón funcional que pueda cubrir las demandas de Gabriel B.Z., de cinco años, que quiere continuar la educación primaria junto a sus compañeros del jardín.
En tal sentido, el Juez de Faltas Martín Brignoli señaló que desde el 2008 – a partir de la sanción de la Ley 26.378- Argentina reconoce el derecho a una educación inclusiva en todos los niveles, y confió que para ello el trabajo de los docentes es indispensable.
Esta no es la primera donación que se consigna en lo que va del año. De hecho, tras la clausura del Maxicosumo días atrás, se debió abonar una suma de $15.000 para colaborar con la cooperadora del hospital San Felipe. Y hace poco más de un mes, un joven que conducía una moto con escape modificado fue multado con $5.000 para el tratamiento de nena con Epidermolisis Ampollar.