La empresa química Atanor anunció este miércoles a través de un comunicado el cierre de las plantas ubicadas en las localidades de Baradero y Munro, provincia de Buenos Aires, alegando la necesidad de concentrar sus esfuerzos en las fábricas de San Nicolás y Pilar y Río Tercero, Córdoba.
En tanto, trabajadores de la empresa denunciaron que por la medida, "unas 180 familias quedaron en la calle", al tiempo que manifestaron su malestar por haberse notificado en la madrugada de este miércoles a través de "un volante en el que se informa el cese de actividades de la compañía".
"Hay 80 familias que quedaron sin sustento en Baradero", explicó Néstor Carrizo, del sindicato de petroquímicos en declaraciones al programa "Mañana Sylvestre", que se emite por Radio 10, mientras que otras 100 perdieron su empleo en Munro.
En ese sentido, subrayó que "es una falta de respeto que lo comuniquen con un cartel, al tiempo que se trata de "una insensibilidad que permiten los funcionarios del Gobierno".
El comunicado de Atanor sostiene que la empresa "continúa con su proyecto de inversiones" destinadas a promover sinergias que permitan seguir ofreciendo un servicio y productos de alta calidad a sus clientes" y "fortalecer año tras año el importante posicionamiento de la compañía en el mercado de protección de cultivos".
