En un contexto de retracción de ventas e incertidumbre económica, este lunes se reanudó la producción de las dos líneas de ensamble de Motomel (motos y bicicletas eléctricas) que estuvieron frenadas los últimos quince días.
No es la primera vez que la empresa recurre a una medida de estas características, y desde la UOM consideraron que "es la modalidad más conveniente para evitar despidos".
Vale recordar que en mayo, bajo una brutal corrida cambiaria, la firma se desprendió de 130 trabajadores y adelantaron vacaciones a otros. "Estamos con mucho miedo", relató un operario, y el sentimiento se comparte entre los pasillos del gigante pañero. "Es un miedo diario porque vas a fichar y no tenés garantías de que la máquina te acepte el fichado", refirió.
"La situación es similar a la del mes de julio y el mercado continúa bastante retraído", declaró Fabián Gigli, vocero de la UOM, pero manteniéndose expectante por un repunte estacional. En términos nominales, durante julio el patentamiento de motos llegó a 39.515 unidades, contra 51.209 del mismo periodo de 2017 y 37.670 de junio. Motomel se ubica en el tercer lugar entre las marcas con mayores ventas y Honda lidera el mercado.
Pese al receso, continuaron activas las líneas de mantenimiento, limpieza y administrativos.