Dos jóvenes de 16 y 18 años quedaron imputados por daño y desobediencia luego de haber huido de un control vehicular a la altura de la localidad de General Rojo e impactar contra un auto que estaba estacionado.
Tras desobedecer la voz de alto, rápidamente se inició una persecución que terminó a los 15 kilómetros en la vecina Conesa. Un tercer involucrado se dio a la fuga y logró evadirse antes de la actuación de los efectivos.
Según confirmaron fuentes policiales a Vía San Nicolás, en inmediaciones de calle Rivadavia al 190 se produjo el choque y pudieron detener a los adolescentes. Se llevaron por delante un vehículo Chevrolet Astra.
El rodado, propiedad de un muchacho de 24 años, terminó con daños superficiales en el espejo izquierdo. No hubo que lamentar lesionados, más allá de algunos raspones propios del golpe.