El Gobierno de San Luis evidenció que una pequeña cantidad de empleados públicos de la provincia y de beneficiarios del Plan Solidario, violó el aislamiento social, preventivo y obligatorio, y tomó nuevas medidas.
El gobernador Alberto Rodríguez Saá explicó lo sucedido en el parte del Comité de Crisis de la provincia. "No son muchos, es un porcentaje muy chiquito, pero los hay y por ello debo hacerles una advertencia. Los agentes de la administración pública son servidores de la comunidad, por lo tanto deben dar el ejemplo, como un muy buen padre de familia", comenzó diciendo el mandatario.
"Deben saber que incumplir con esta medida obligatoria representa un antecedente penal, una mancha que queda para siempre, por lo que a aquellos trabajadores del Estado que sean sorprendidos con esta actitud, se les iniciarán los sumarios correspondientes, mientras que en caso de comprobarse que han violado el aislamiento preventivo y obligatorio serán separados de la administración pública".
El primer mandatario también dio cuenta de que en el listado de infractores "figuran beneficiarios del Plan de Inclusión. También de corroborarse esa actitud, los vamos a asistir con lo necesario, como en alimentos, pero no volverán al Plan; no nos vamos a olvidar de su situación, pero no queremos gente así".