Hace poco menos de una semana que empezó a circular por redes sociales la foto de una mujer embarazada, ella era María Gette.
La mujer murió el Día de la Madre, tras dar a luz a su tercer hijo. Ahora su familia y amigos, que están devastados, denunciaron públicamente a la clínica privada Cerhu, de la capital puntana, y al médico Ralph Bravo, quien la atendió.
Via San Luis se comunicó con Gustavo Gette, hermano de la víctima, quien prefirió resguardarse con su familia en este momento de mucho dolor y evitar, por el momento, dar declaraciones a la prensa.
Sin embargo fue inevitable no hacer eco de la terrible noticia, ya que se difundió por Facebook, Instagram y WhatsApp. Incluso estados de esta última se plagaron de su foto en pedido de Justicia con el hashtag #justiciapormaría.
Fuentes revelaron a Via San Luis que la mujer habría sido "obligada" a parir por vía vaginal, porque ya tenía dos hijas que habían nacido así, a pesar de que "ella manifestó que no podía, que sentía mucho dolor y que quería una cesárea, no fue escuchada" por su médico, ni por el personal médico que la asistió.
La misma fuente contó que a María "se le tiraron encima" para que el bebé saliera, es decir que le habrían realizado la maniobra de Kristeller, que está totalmente desaconsejada por los riesgos que puede producir tanto en la madre como en el bebé.
La misma fuente, que prefirió no revelar su identidad, contó que el bebé nació con más de cuatro kilos y que debieron "fracturarle" la clavícula para que saliera del canal vaginal. Sin embargo, está en buena salud. Pero sin su mamá.
Maria Gette habría sufrido un desgarro, con el cual perdió mucha sangre y necesitó varias transfusiones de sangre.
Aún no está claro qué fue lo que le provocó la muerte, pero publicaciones de amigos y algunos familares relatan que sus pulmones colapsaron por un edema, que tuvo fiebre y falleció. Lo cierto es que ahora tres hijos quedaron sin su mamá y una familia que no entiende cómo pasó ésta tragedia.
Están por organizar una marcha en pedido de Justicia y para que ninguna mujer sufra lo que le pasó a Gette.